Un nuevo ciclo escolar comenzó, y en el camino al colegio también se aprende, esperar a que un semáforo se ponga verde o mirar antes de cruzar por un paso de peatones son algunos de esos hábitos cotidianos que, si se adoptan desde la infancia, pueden ayudar a mejorar nuestra seguridad vial y nuestra salud.
La sugerencia y recomendación de este profesional, es que en los establecimientos educativos desde los primeros grados enseñen e incorporen la seguridad vial a sus vidas, que los niños aprendan nociones de movilidad segura a través de un taller y que difundan sus experiencias como usuarios de las vías públicas, a través de una carta o un dibujo dirigido a sus padres, a alguna institución, a sus compañeros o a quien ellos quieran, para concienciarles y trasladarles la importancia de mantener comportamientos y actitudes responsables en la vía pública.

Que estos los primeros años de vida escolar, se ponga en marcha la concientización del comportamiento y prevención en la vía pública, no solo a los niños sin también a familiares y amigos de las consecuencias de ser víctimas de un accidente de tránsito, con el compromiso de la seguridad vial y la convivencia en el ámbito de la movilidad.

Que nuestros docentes puedan incorporar voz de enseñanza y recomendaciones a los alumnos de Educación Primaria para que, a partir de cómo viven cada día sus desplazamientos hacia el colegio, estos puedan pueden ser agentes multiplicadores brindando consejos de seguridad vial tanto en su entorno familiar como en el municipio y a la población en general.
El objetivo de este profesional es incentivar un modelo de convivencia en un espacio compartido, tanto urbano como rural, orientado hacia la problemática de los desplazamientos diarios de la comunidad escolar en nuestras calles.

Este profesional es integrante de –CIFTT (Centro de Investigación Forense y Tecnología del Tránsito) – siendo mi intención a través de estos artículos, promover los comportamientos seguros en las calles y rutas de la provincia y la nación.
Este profesional es Perito Investigador del CIQUIME – (Centro de Información Química para Emergencias) – Perito de Investigación Forense de Incendios con registro N.º DIFI 309-18”. NFPA (National Fire Protection Association). Bajo las Normas N° 1033 aplicadas en los Estados Unidos, bajo las certificaciones la I.A.A.I. (International Association of Arson Investigators) organismos gubernamentales y Agencia A.T.F. (Bureau of Alcohol, tobacco, firearms and explosives – Agencia federal de alcohol, armas y explosivos) – Integrante de -CIFTT – (Centro de Investigación Forense y Tecnología del Tránsito) – en Alianza con SCI – (Servicios Criminalísticos Inteligencia Colombia)- Miembro Suscripto al programa del Instituto Nacional de Justicia (NIJ) de la Agencia de Investigación Científica Forense, Evaluación y Tecnología del Departamento de Justicia de los Estados Unidos – (999-N. Capitol St., NE, Washington, DC 20531). –