Ruta a Chile y la Seguridad Vial

En todos los pasos fronterizos con Chile se registró un incremento del tráfico en los últimos diez años.

La locura por Chile es total. ¿Por qué hay tanto interés por viajar al país vecino? el factor “PRECIOS”. Es que está demostrado que hay productos que cuestan mucho menos que en Argentina, llegando a registrar diferencias superiores al 65 % o más.

Pero las rutas que conectan al país trasandino se encuentran en muy mal estado, cuando se trata de la seguridad vial, está al borde del colapso. Sin banquinas ni mantenimiento adecuado, su peligrosidad se cobra vidas mientras las soluciones del gobierno se postergan.

La Ruta Nacional N° 231 en Argentina, que conecta a Villa La Angostura (NQN) con la Ruta Nacional N° 215 en Chile, atraviesa una crisis que pone en jaque la seguridad de miles de conductores. Camiones, colectivos y autos transitan diariamente por este camino que se encuentra en condiciones críticas: no tiene banquinas, sufre congestiones constantes, y es escenario de numerosos accidentes, muchos de ellos fatales, que podrían evitarse.

El problema de la falta de infraestructura agrava la situación en la alta montaña, especialmente en el Paso Internacional SAMORÉ. Las largas filas y las demoras para cruzar a Chile generan tensión entre los conductores quienes realizan maniobras peligrosas como adelantamientos en doble línea amarilla. Hasta el último día del mes de diciembre del 2024 cruzaron más de 1.052.530 personas por el paso Internacional Cardenal Samoré, sumado al mal estado del camino, hace que cualquier imprudencia sea una potencial tragedia. 

SE INCREMENTÓ EL TRÁFICO POR TODOS LOS PASOS FRONTERIZOS

La realidad es que en todos los pasos fronterizos con Chile se registró un incremento del tráfico en los últimos diez años. Los pasos más chicos fueron los que más crecieron, como el Mamuil Malal, que aumentó un 205% o el Pehuenche en Mendoza, con el 690%.

En cuanto a Samoré, tal como se menciona, el tráfico general casi se triplicó. Pero mientras que la cantidad de entradas a la Argentina se incrementó un 98%, las salidas del país aumentaron el 90%. De hecho, del tráfico total un 20% que cruzaron hacia Chile fueron camiones, mientras que en el mismo período la cantidad de camiones que ingresaron representaron el 18%.

IMAGEN: GENTILEZA

“Mientras la Argentina ha disminuido el paso de cargas en un 38% en estos últimos 10 años, Chile ha incrementado en un 103% el transporte de cargas por el paso en el periodo descrito. Se ha incrementado no solo la cantidad de Vehículos de Carga, sino que además ha aumentado la cantidad y el volumen de ésta, con las consecuencias de un mayor deterioro de rutas y caminos y un alto riesgo de accidentes de tránsito.

El movimiento general de vehículos por el paso Cardenal Samoré se ha triplicado en los últimos 10 años. Mientras que, con respecto a los Vehículos de Carga, su crecimiento ha aumentado en un 110%.

Los Vehículos Particulares también han Triplicado su movimiento en los últimos años, la relación de salidas y entradas varía según esté la economía favorable para uno u otro lado de la cordillera, hay años que ingresan más chilenos y otros que salen más argentinos como ahora que es netamente favorable para la salida de los argentinos, por el diferencial de precios de servicios y mercaderías.

RÉCORD:

El paso fronterizo internacional Cardenal Samoré, la vía terrestre por donde las mercaderías y personas ingresan y salen a chile por territorio argentino, es el denominado circuito “CHILE-CHILE”, registró el flujo más alto en los últimos años. Asi lo consideró el Austral de Osorno, indicando que los índices subieron desde 135.941 Toneladas en el año 1996 a 730.178 el año pasado.

Esta estadística oficial fortalece la hipótesis de que lejos está el vecino país de utilizar otros pasos alternativos para aquellos camiones que vienen desde el norte, como el caso de Santiago de chile, y bien podrían evitar tener que cruzar por este paso que afecta las rutas de la región. (ni mencionar el daño de forma directa a la ciudad de Villa La Angostura).

Falta de mantenimiento, banquinas estrechas sin demarcación ni señalización vial, baches y pozos a elección, gustos y tamaños, son parte de los problemas que presenta la ruta incrementando un riesgo constante para las miles de personas que circulan diariamente, las condiciones deplorables que han sido detonante de numerosos accidentes, muchos de ellos fatales.

Las mejoras estructurales parecen estar aún fuera de alcance. En el corredor más transitado entre Argentina y Chile en la región Sur, se ha transformado lamentablemente por estos días en un camino de alto riesgo donde se expone la falta de planificación para garantizar la seguridad de sus usuarios los que aseguran que los denominados “parches” llevan años, lo que no soluciona las pésimas y peligrosas condiciones en que se encuentra la Vía Internacional.

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