El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) declaró la alerta fitosanitaria en Río Negro por la expansión de la Tucura Sapo (Bufonacris claraziana), una plaga endémica de la Patagonia que afecta los pastizales naturales y pone en riesgo la producción agropecuaria.
La resolución, publicada en el Boletín Oficial, también alcanza a Chubut y Santa Cruz, y tendrá vigencia hasta el 31 de marzo de 2026. El organismo busca reforzar las tareas de prevención, control y vigilancia, especialmente en zonas rurales donde se registraron los primeros focos del insecto.
Según explicó el SENASA, el avance de la Tucura Sapo representa “una seria amenaza para la base productiva de pequeños productores, agricultores familiares y comunidades rurales”. Este insecto herbívoro se alimenta de gramíneas y leguminosas, y puede provocar daños importantes en los campos de pastoreo y en los cultivos forrajeros.
En Río Negro, los monitoreos recientes confirmaron presencia de la plaga en áreas del sur y centro provincial, donde técnicos del organismo trabajan junto a productores y municipios para frenar su avance. Además, se conformó la Mesa Interinstitucional para el Manejo de Tucuras en la Patagonia (MTP), que coordina acciones entre el INTA, las provincias y el sector privado.
Si bien la Tucura Sapo no afecta la salud humana ni animal, su rápida reproducción y resistencia a condiciones extremas la convierten en una plaga difícil de controlar. Por eso, el SENASA pidió que cualquier detección de ejemplares o huevos sea reportada de inmediato al organismo, y recordó que los productores deben aplicar productos fitosanitarios autorizados.
La medida busca evitar que la especie continúe expandiéndose durante los próximos meses, una etapa clave del ciclo biológico del insecto, cuando la población alcanza su punto más alto.
